Si hay algo que he aprendido en mis más de 25 años en este sector es que las mejores innovaciones no empiezan con un producto, sino con un problema. Los productos deben crearse para resolver problemas.
En AIM, así es como enfocamos todo lo que hacemos. Ya sea que estemos desarrollando una nueva aleación, optimizando un sistema de fundente o refinando una pasta de soldadura de paso fino, nuestra primera pregunta es siempre: ¿Qué reto tenemos resolver para el cliente?

Cómo construimos el futuro
No desarrollamos productos sólo para decir que lo hemos hecho. Lo hacemos porque algo no funciona tan bien como debería.
Cuando creamos La aleación REL61™por ejemplo, se debía a que los clientes necesitaban una alternativa al La SAC305 que fuera más rentable, más fiable y más fácil de integrar en las operaciones existentes.
Así que creamos una aleación desde cero para reducir la fatiga térmica, mejorar la humectación y reducir los vacíos, sin necesidad de revisar el proceso. Una década después, REL61™ funciona en líneas de soldadura SMT, por ola, selectiva y robótica de todo el mundo, no porque sea diferente, sino porque funciona.
Ese mismo enfoque es el que impulsa nuestra respuesta a la miniaturización. A medida que se reducen los componentes y aumenta la densidad de las placas, las pastas de soldadura tradicionales llegan a sus límites. Estamos ayudando a los clientes a resolver este problema con importantes inversiones en la producción de polvo ultrafino y formulaciones avanzadas como NC259FPAutilizando polvos de tipo 6 y 7 para la impresión de paso ultrafino.
Y hay mucho más cocinándose entre bastidores. Nuevos sistemas de flujo. Pastas para procesos específicos. Ajustes en las aleaciones con grandes implicaciones. Hacemos una hoja de ruta cada seis meses porque el sector avanza muy deprisa y queremos mantenernos a la vanguardia.
La colaboración y la cultura impulsan las soluciones
Una de las cosas que siempre digo es que la I+D no sólo ocurre en un laboratorio o en un vaso de precipitados. Ocurre en las conversaciones. En las plantas de producción. A través de la colaboración.
En AIM, tenemos la suerte de colaborar con organizaciones como iNEMI, IPC, SMTA y varias universidades de todo el mundo. Estos colaboradores nos ayudan a ver más lejos, probar más rápido y resolver problemas mayores.
Pero es nuestra cultura interna la que realmente hace que la innovación perdure. Contamos con ingenieros, personal de producción, profesionales de logística y equipos de atención al cliente de talla mundial que se preocupan por hacerlo bien.
Ya he dicho antes que el ingrediente clave de AIM es el factor "dar un &^$", y lo mantengo. Es una cultura de propiedad, excelencia y seguimiento.
Reflexiones finales: Creados para resolver, listos para apoyar
La industria electrónica se mueve con rapidez. Los diseños cambian, las especificaciones se hacen más estrictas, las expectativas aumentan y los materiales de soldadura tienen que seguir el ritmo. En AIM, nuestro objetivo es liderar, resolver y apoyar.
Nuestros materiales están diseñados para un fin determinado. Nuestros equipos de servicio conocen su proceso. Y estamos preparados no solo para lo que hay ahora, sino para lo que vendrá después.
Si has trabajado con AIM, probablemente ya hayas experimentado esa mentalidad. Si no lo ha hecho, le invito a conecte con nosotros. Haznos preguntas. Desafíenos. Permítanos mostrarle lo que significa trabajar con una empresa creada no sólo para vender, sino para resolver.
- Timothy O'Neill
Director de Gestión de Productos